No se llamaba Rodolfo, tuvo nacionalidad italiana y superó al mismísimo Michael Jackson en la lista Billboard. Tras 17 años de su partida física, el «Rey de los diciembres» sigue vivo en la música que interpretó y en los millones de usuarios que aún reproducen su música con la nostalgia de «aquellos diciembres» que como dicen desde antaño: nunca volverán.
Poco se habla del éxito internacional que tuvo Marco Tulio Aicardi Rivera, en comparación con el ferviente recordatorio que relaciona a la música tropical colombiana exclusivamente con el mes 12 de cada año desde los ochentas: «¡uy! una canción de Rodolfo, ahora sí llegó diciembre». Esa historia queda pendiente por contar.
Con la música del caribe corriendo por sus venas y la mezcla de cumbia con las tradiciones antioqueñas, Aicardi logró llevar a la música tropical colombiana a lo más alto del mundo, no solo con sus canciones más tradicionales como «Cariñito» o «La colegiala», sino con todas sus grabaciones con Los Hispanos y con La Típica RA7, que fue su propia agrupación.
Llevar la música a lo más alto no solo se menciona desde el orgullo patrio, sino que se puede confirmar por los registros históricos y los comparativos e investigaciones que expertos han realizado por años, que el magangereño peleó a la par en ítems puntuales con históricos de la industria musical como Frank Sinatra o Michael Jackson.
El éxito internacional de Rodolfo Aicardi:
Según el periodista Armando Plata Camacho, Michael Jackson fue superado en la lista Billboard por el intérprete colombiano que inesperadamente logró captar la atención de los norteamericanos y los europeos, especialmente en países como España, Italia y Francia, ocupando primeros lugares por al menos 21 semanas con su éxito «La colegiala».
En esa época competía contra el estadounidense sobre quién vendía más discos en Francia. Aicardi obtuvo 15 discos de oro y dos mil o dos mil quinientos temas interpretados en su carrera, confirmando que fue un verdadero ‘peso pesado’ musical.
Rodolfo estaba acostumbrado a grabar música peruana, pero imprimiendo su estilo propio grabando exitosos ‘covers’ y generando un éxtasis musical que fue reconocido por millones de personas a nivel mundial y que hoy en día parece más vigente que nunca.
Además de ser un éxito musical, «La colegiala», que se publicó 1982, se convirtió en un fenómeno que impactó a diferentes sectores económicos siendo utilizada para la grabación de un comercial de Nescafé que se divulgó en Francia y como se esperaba, también superó las expectativas.
‘Rodolfo y la Típica RA7’, llegó a vender más de un millón de copias en ese país, que lo convirtió en merecedor de un disco de oro por ello, a la par de las de otros grandes nombres de la industria de la música.
Una de las giras más representativas del artista fue en el Teatro Olimpia de París, donde fue aplaudido por más de 20 mil personas y puso en alto la cumbia y la música tropical colombiana.
En Perú, esta canción es considerada como un himno nacional, un patrimonio cultural. Por esta razón en los Juegos Panamericanos de 2019 de Lima, el tema sonó acompañando el desfile de los 600 miembros de la delegación peruana en la ceremonia inaugural en lo que se señaló como un sublime momento de identidad cultural.
De la balada a la música tropical
Como en la mayoría de las historias de superación, de la cual Aicardi no es ajeno, en Magangué, Bolívar tuvo que trabajar desde muy joven; empujaba una carreta de plástico vendiendo quesos mientras cantaba canciones de José Alfredo Jiménez, Pedro Infante o Antonio Aguilar lo que despertó un interés por estos géneros musicales.
Aicardi se inclinó por la balada, género con el que inició su carrera y se convirtió en un fenómeno por su voz y su particularidad para crear un sello único, reconocible a millones de kilómetros.
Con el Sexteto Miramar adoptó el nombre artístico de ‘Rodolfo’, con el que pasaría a la historia al ser parte de un experimento de Discos Fuentes, la primera casa discográfica prestigiosa del país, y se habla de experimento porque él era capaz de interpretar cualquier género que le pidieran los productores.
En 1968, debido a que el cantante Gustavo ‘El Loko’ Quintero renunció a ser el vocalista de Los Hispanos para fundar su propia orquesta Los Graduados, Rodolfo se presentó a hacer una audición con Los Hispanos, siendo aceptado de inmediato por su tono alto de voz, de aquí en adelante, como se dice popularmente: el resto es historia.
Debido a sus transiciones musicales, el número de canciones interpretadas por Rodolfo Aicardi es estelar: «Frank Sinatra tiene 1.100 canciones interpretadas, mi papá tiene 1.500«, recordaba Gianni Aicardi, uno de sus hijos en entrevista.
Cómo terminó el «Rey de los diciembres»
Rodolfo, de padre italiano y madre colombiana, pagó el «precio del éxito» y se excedió, por eso su organismo se la cobró con obesidad y diabetes, necesitaba trasplante de riñones y de páncreas. Su descuido lo llevó a requerir de diálisis permanente, falleció ciego y amputado de una pierna. El 24 de octubre de 2007, finalmente se apagó su voz.
Aunque se habla de una crisis económica, lo que sí es cierto es que fue, es y seguirá siendo un fenómeno musical que ha llevado alegría a millones de personas y ha encendido la fiesta desde que inicia y “Hasta las seis de la mañana”.